Así fue mi infancia
Yo nací en Pilar de la Horadada, provincia de Alicante, era la mayor de cuatro hermanos y vivíamos en una finca que se llamaba Lo Montanaro. Mi padre se llamaba José García y era agricultor y el encargado de la finca, y mi madre se llamaba Julia Henarejos y era ama de casa.
Mi casa de Lo Montanaro era muy grande, aunque sin comodidades, no había ni luz ni agua corriente ni tan siquiera un cuarto de baño. Teníamos un bater de aquellos antiguos en el patio. Para alumbrarnos usábamos un quinqué de gas y velas, y para traer agua a casa teníamos que llenar un cántaro del agua del aljibe que se encontraba en el huerto. Este agua era para fregar, para beber, para lavarnos… para todo. La ropa se lavaba en un huerto en una pila que había al lado del aljibe, a la intemperie, tanto si hacia frío como si hacía calor.
Contábamos, eso sí, con una ayuda inestimable por parte de una vecina, que estaba casada y tenian un hijo, y que acabó siendo como una madre para mí y mis hermanos. Su casa lindaba con la nuestra y había una puerta que las unía, con lo que en verdad las dos familias vivíamos en la misma casa. Recuerdo que ella, a la que llamábamos cariñosamente chacha, nos encendía la chimenea por las noches, nos hacía el desayuno por las mañanas, nos cosía la ropa, nos peinaba y en el carnaval nos hacía difraces, con nosotros era una madre fantástica.
Los fines de semana y de fiesta nos íbamos a la casa que teníamos en el pueblo, y allí sí había agua y luz y planchábamos con la plancha eléctrica en vez de con la de carbón.
Con esto os daréis una idea de cómo vivíamos cuando era una niña de cinco años.
Un saludo a todos
Yo nací en Pilar de la Horadada, provincia de Alicante, era la mayor de cuatro hermanos y vivíamos en una finca que se llamaba Lo Montanaro. Mi padre se llamaba José García y era agricultor y el encargado de la finca, y mi madre se llamaba Julia Henarejos y era ama de casa.
Mi casa de Lo Montanaro era muy grande, aunque sin comodidades, no había ni luz ni agua corriente ni tan siquiera un cuarto de baño. Teníamos un bater de aquellos antiguos en el patio. Para alumbrarnos usábamos un quinqué de gas y velas, y para traer agua a casa teníamos que llenar un cántaro del agua del aljibe que se encontraba en el huerto. Este agua era para fregar, para beber, para lavarnos… para todo. La ropa se lavaba en un huerto en una pila que había al lado del aljibe, a la intemperie, tanto si hacia frío como si hacía calor.
Contábamos, eso sí, con una ayuda inestimable por parte de una vecina, que estaba casada y tenian un hijo, y que acabó siendo como una madre para mí y mis hermanos. Su casa lindaba con la nuestra y había una puerta que las unía, con lo que en verdad las dos familias vivíamos en la misma casa. Recuerdo que ella, a la que llamábamos cariñosamente chacha, nos encendía la chimenea por las noches, nos hacía el desayuno por las mañanas, nos cosía la ropa, nos peinaba y en el carnaval nos hacía difraces, con nosotros era una madre fantástica.
Los fines de semana y de fiesta nos íbamos a la casa que teníamos en el pueblo, y allí sí había agua y luz y planchábamos con la plancha eléctrica en vez de con la de carbón.
Con esto os daréis una idea de cómo vivíamos cuando era una niña de cinco años.
Un saludo a todos
2 comentarios:
¡HOLA GUAPA!
ME ENCANTA COMO HAS EMPEZADO LA HISTORIA, PARACE UN CUENTO Y TE METES EN EL FÁCILMENTE, SOBRE TODO CUANDO FORMAS PARTE DE ESA VIDA TAN MARAVILLOSA QUE HAS TENIDO, PORQUE A PESAR DE LAS COSAS MALAS, MAMÁ, NO NOS PODEMOS QUEJAR. EL PAPÁ DESDE DONDE TÚ YA SABES, ESTÁ "FLIPANDO" Y LO OIGO DECIR "LA TÍA MARÍA ESTA...".
PARA MÍ ES REALMENTE INCRÍBLE LO QUE ESTÁS HACIENDO Y CUANDO LO CUENTO A MI GENTE, ALUCINAN "JOER QUÉ MÉRITO, ¿SIN HABER IDO A LA ESCUELA DICES ...? ESTO ES LO QUE ME DICEN.
BUENO MAMI, QUE ESTOY SÚPER CONTENTA DE QUE ESTÉS HACIENDO ESTO Y QUE ESPERO CON ANSIA EL SIGUEINTE CAPÍTULO.
TE QUIERO.
"E KEYO ABUELA" DICE BRUNO.
MUUUUAAAAA!!!!!
ERES ÚNICA Y GRACIAS A TI AL ABUELO FORMO PARTE DE UNA FAMILIA TAN ESPECIAL... CADA UNO SOMOS DISTINTOS, PERO NO PODEMOS NEGAR QUE LLEVAMOS EL "TÁRRAGA" EN LA SANGRE Y NO HAY NADA DE LO QUE ME SIENTA MÁS ORGULLOSA.
OS QUIERO!!!!!
Belén!
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